domingo, 19 de diciembre de 2010

En la guerra, como en el amor, todo vale y siempre queda un perdedor. Normalmente, pierde el que quiere más al igual que en una mesa de black yack.
Me olvidaré de tu amor de garrafón, olvidaré de tus besos de judas, hoy voy a darle a mi pobre corazón, una de capas de alguna pintura, que borre las humedades que le han dejado tus recuerdos.
Hoy las penas, como la pasión duran poco y dejan siempre un mal sabor, una mezcla entre sal y limón exprimido en mi marchito corazón.
Y detente, pase mis años olvidado en una trampa para ratones en la que tu eres el queso.
Tu con carrera en el amor y yo en 1º de la ESO para estudiar el primer beso que me diste.
Y ahora te digo que no tienes corazón, que no me dejas elección, que nuestra relación fue un chiste.

No hay comentarios:

Publicar un comentario